Tras el evento de MAPFRE celebrado en Santiago de Compostela, entrevistamos a Jesús Manuel Alonso Escurís, presidente de Jealsa. De formación, ingeniero industrial, se incorpora a la empresa familiar en 1981, donde ejerce de director general desde 1986 hasta 2015. En esa fecha asume el papel que cumplía su padre, el fundador Jesús Alonso.
Pregunta: JEALSA nació en 1958. Son casi 70 años de trayectoria y, aunque mantiene su carácter familiar, se ha transformado en una multinacional con una fuerte expansión internacional con actividades en otros sectores. ¿Considera que en estos años han cambiado los riesgos a los que se enfrenta su actividad?
Respuesta: Absolutamente. Y no sólo porque la propia empresa ha evolucionado, como, por ejemplo, pasando de una fábrica a siete repartidas por ubicaciones tan dispares como Chile, Brasil, Guatemala y la propia España, sino que la propia sociedad ha mudado. Cada vez, las organizaciones son más complejas y, con ello, aumentan los riesgos a los que nos enfrentamos.
P: Una actividad como la conservera, además del riesgo de incendio y las pérdidas asociadas, ¿cuáles son los principales riesgos a los que tienen que protegerse?
R: Aunque puede parecer de Perogrullo, lo primero es elaborar un mapa de riesgos de la compañía y a partir de ahí intentar protegernos ante cualquier eventualidad. Desde ciberataques, impagos, riesgos de responsabilidad civil, laborales. etc..
P: En el incendio del 8 de mayo de 2021, en el que se vieron afectados 11.000 metros cuadrados. ¿Cuál fue su primer pensamiento al recibir la noticia? ¿Cuál fue su primera preocupación? ¿Y cuáles fueron las primeras decisiones que tuvieron que adoptar?
R: Realmente me parecía increíble. ¡¿Cómo podría estar pasándonos esto?! Era la pregunta que me hacía. Fueron horas muy complicadas, pero desde el primer momento mi mayor preocupación era la seguridad de las personas y la situación de todos nuestros empleados y sus familias. Al día siguiente, el domingo, el objetivo era otro. Pusimos en marcha un Comité de Crisis con tres designios fundamentales: mantener el empleo, seguir sirviendo a nuestros clientes y reconstruir. Esa era nuestra hoja de ruta.
P: JEALSA es una empresa familiar, en la que también sus trabajadores son familias de la zona y su aportación económica es clave para la región. ¿Cómo recuerda esos primeros días del siniestro? ¿Cuál fue la respuesta de los trabajadores y vecinos de Boiro?
R: No podemos estar más que agradecidos. Desde el primer momento las muestras de apoyo y afecto fueron unánimes. Instituciones, clientes, proveedores, colaboradores y, por supuesto, nuestros vecinos, nos hicieron llegar sus muestras de cariño y solidaridad. Por nuestras instalaciones pasaron los máximos representantes políticos de Galicia y de nuestro entorno. El Comité de Empresa también jugó un papel fundamental, coordinando y comunicando al equipo humano las decisiones que se iban tomando y ayudando a que pudiéramos implementar las medidas lo más ágilmente posible.
P: Dos años después del siniestro, ¿han conseguido restituir plenamente su actividad? ¿Han logrado mantener los puestos de trabajo?
R: Nos sentimos orgullosos de haber recuperado parte de la actividad en sólo 12 días. Pudimos seguir haciendo frente a nuestro compromiso y finalizamos el año con sólo un 1% de caída de ventas y, el año siguiente, 2022, con máximo de facturación hasta la fecha. En el ejercicio actual, seguimos creciendo a pesar de la bajada generalizada de consumos y de que los mercados se están encogiendo.
P: Tras un siniestro tan devastador, se pone en valor la importancia de una buena gestión de riesgos. ¿Cómo calificaría esa figura o tarea interna como empresa? ¿Cuáles considera que han sido las principales lecciones aprendidas?
R: No teníamos la función de Gerencia de Riesgos asignada a una persona con las competencias necesarias. Esta es la verdadera lección aprendida: disponer de una persona y una organización transversal a toda la Organización Jealsa, con dependencia directa de la Presidencia, para velar por la Protección de todos nuestros Activos, desde la Prevención hasta la Detección y el Confinamiento/Contención de Emergencias.
P: ¿Cuál ha sido el papel del seguro en una contingencia de estas características?
R: Fundamental en la Continuidad del Negocio, tanto en su faceta de recuperación de lo perdido como en la reanudación de las actividades. Y estoy particularmente agradecido a los ejecutivos de MAPFRE que nos apoyaron desde el primer momento. ¡Trabajar sintiéndose seguro, no tiene precio! ¡Muchas gracias!