El Litio es un material fundamental para la fabricación de baterías eléctricas y, por tanto, un recurso indispensable para completar la transición energética del transporte mundial. Expertos nos hablan del futuro de esta tecnología y los desafíos de una industria básica para la movilidad sostenible.
Los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) desplegados en España han supuesto un marco favorable para el desarrollo de la industria del Litio en la región y han sacudido el mercado de baterías con resultados muy positivos. “Se ha reforzado la cadena de valor en varios de sus elementos (electrónica de potencia, integradores, sistemas de control, etc.) para poder dar soporte a todo este despliegue. Estos programas han hecho que los desarrolladores de proyectos se hayan lanzado a la carrera de capturar puntos de acceso a la red”, explica Eugenio Domínguez, Vicepresidente de AEPIBAL.
“Durante estos dos últimos años se han presentado varios proyectos para la instalación de grandes fábricas de baterías en España. La viabilidad de estos proyectos y otros que aún no se han consolidado dependerá de la disponibilidad de financiación adecuada para que sean competitivos frente a otros países” añade Luis Manuel Santos, presidente de BatteryPlat. Estas iniciativas se apoyan en la industria automotriz del país y de los potenciales yacimientos de Litio en la Península, aunque “entre la extracción y el ensamblado final de la batería hay otras etapas de valor que, a día de hoy, están totalmente dominadas por países asiático”, recalca Santos.
Un panorama tecnológico complejo
La innovación dentro de las tecnologías del ion de Litio suscita cada vez más interés, en concreto en el ámbito del almacenamiento de larga duración, en el que se desarrollan técnicas de flujo, de aire comprimido o nuevas químicas de baterías. La subfamilia que ha presentado avances más relevantes en 2022 fue la de estado sólido, con más de 2.800 patentes —la mayoría procedentes de Asia—. “Solo el 9% de las empresas procedían de Estados Unidos y el 5% de Europa. Esta tecnología emplea un electrolito sólido en lugar de los líquidos de las baterías convencionales, y pueden ofrecer soluciones potenciales para muchos de los problemas de las baterías de iones de litio líquidas, como la inflamabilidad, el alto coste o la baja densidad energética”, apunta el presidente de BatteryPlat.
Precisamente esta dependencia del exterior, tanto de materias primas críticas como de tecnologías desarrolladas, es uno de los principales retos identificados por Comisión Europea para la industria. “Se están elaborando dos propuestas regulatorias para afrontar estos retos: la European Critical Raw Materials Act y la Net Zero Industry Act. Las medidas contempladas en esas propuestas ofrecerán oportunidades a las entidades españolas para agilizar el desarrollo de tecnología propia y superar con éxito este desafío”, asegura Santos. Desde AEPIBAL señalan también proyectos demostrativos como el Grid Forming, que “permitirán al almacenamiento funcionar aportando verdadera inercia al sistema eléctrico y, en consecuencia, fiabilidad, estabilidad e integración de renovables en el sistema”. Además, instan al “perfeccionamiento de la industria nacional para dar respuesta técnica y productiva a este mercado como oportunidad única y de extrema potencialidad, que puede convertirnos en líderes como ha sucedido en el pasado con el desarrollo de renovables”.
Para que este avance se haga de manera firme, también es necesaria una evolución normativa. “Hace escasamente cuatro años el almacenamiento ni siquiera estaba considerado como un elemento del sistema eléctrico y, por ello, quedaba imposibilitado para operar en los mercados. En el último año se han hecho grandes avances, pero sin ser culminados. Queda pendiente la revisión de las especificaciones de detalle de acceso y conexión, para que la dualidad del almacenamiento como generador/consumidor quede reflejada y no compita con fuentes de generación en el acceso a la red, dado su carácter complementario a las energías renovables. Temas como el mecanismo de capacidad siguen en desarrollo, convirtiéndose en barrera para el despliegue masivo y rentable del almacenamiento”, afirma Eugenio Domínguez.
Un avance en paralelo con la sostenibilidad
La sostenibilidad es, además de objetivo de la transición energética global, un requisito indispensable de su progreso. “La industria del Litio solo va a ser viable, tanto económica como socialmente, si va aparejada por la circularidad. La reutilización de materiales, la minimización de residuos o la búsqueda de segundas vidas o usos de las baterías son cruciales para un desarrollo sostenible, con el doble significado de la palabra: desde un punto de vista medioambiental y económico”, afirma el vicepresidente de AEPIBAL. Esta economía circular es esencial tanto por la cantidad limitada de recursos como por su dificultad y coste de extracción. “Ya están en marcha proyectos de despliegue real de reciclaje de baterías, utilización de baterías del sector de automoción en sistemas estacionarios y extracción de materiales, que veremos en operación a la mayor brevedad”, añade.
Desde Batteryplat cuentan con un grupo de trabajo que busca fomentar proyectos que alcancen una reutilización óptima y adecuada de las baterías, incrementando su vida útil e incentivando el ecodiseño como herramienta clave. Esto permitirá implementar, “en las baterías que están actualmente en fase de diseño, los conceptos de reutilización y reciclado, además de impulsar nuevos sistemas de reciclado y recuperación de materias primas presentes en las baterías”, concluye su presidente.
Han colaborado en este artículo…
Eugenio Domínguez, Vicepresidente de AEPIBAL. Cursó estudios de Ingeniería de Telecomunicación en la Universidad de Sevilla. En el año 1999 se incorporó como investigador en el grupo de Tecnología Electrónica, de la Universidad de Sevilla, liderando desde el 2005 el laboratorio de Desarrollo de Sistemas de Potencia para Integración de Sistemas de Energías Renovables, investigando y desarrollando la base de las soluciones para integración de almacenamiento. Emprendedor nato, ha desarrollado y formado parte de seis iniciativas empresariales.
Luis Manuel Santos, presidente de BatteryPlat. Ingeniero Industrial especialidad Electrotecnia por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de Gijón de la Universidad de Oviedo y máster en Administración de Empresas por el Instituto Universitario de la Empresa.
Actualmente es Director de Innovación (I+D+i) dentro de la Dirección de Ambiente, Sostenibilidad, Innovación y Cambio Climático de EDP España.
